sábado, 18 de junio de 2016

LOS MALDITOS

   No todos los malditos de la literatura lo son por las mismas razones.
   Aquí hay cuatro líderes. Veamos por qué...

   El término malditos tiene dos paradigmas, aunque no de este siglo: Jean Arthur Rimbaud y Edgar Alan Poe. Malditos y geniales. Rimbaud dejó de escribir a los 19 años y se dedicó -entre otros turbios oficios- al tráfico de esclavos. Poe -alcohólico y de trágica vida- murió en la calle bajo un ataque de delirum tremens. Ezra Pound (1885-1972), monumental poeta, adhirió al fascismo, fue acusado de alta traición contra los Estados Unidos (su país), lo declararon demente y llegó al hospicio encerrado en una jaula. El británico Dylan Thomas (1914-1953), alcohólico, murió en una taberna tras decir "veinticinco whiskys no es mal récord...". Vladimir Nabokov (1899-1977, ruso nacionalizado estadounidense) llevó una vida casi bucólica (profesor de Literatura y coleccionista de mariposas), pero su novela Lolita -amor entre un cincuentón y una chica de doce años- lo alineó en el escándalo. Truman Capote (1924-1984) -alcohólico, drogadicto, homosexual- fue condenado por la high society norteamericana, de la que fue niño mimado, por las miserias de esa clase que reveló en sus novela Plegarias atendidas.



Ezra Pound (1), fue una cumbre de la poesía elaboradísima, culta y cosmopolita. Influyó sobre Yeats, Joyce y Eliot. Fue brillante traductor de clásicos y experto en literatura china. Lo mejor de su obra está en Cantos (inconclusa) y Cantares. Dylan Thomas (2). Poeta de vanguardia, guionista de cine y televisión periodista. Se incorporó al movimiento Nuevo Apocalipsis. Asombró en 1934 con su libro Dieciocho poemas y Bajo el bosque lácteo. Su libro más leído: Retrato del artista cachorro. Vladimir Nabokov (3). Brillante escritor y profesor y analista de literatura. Su novela más famosa es Lolita: polémica en todo el mundo, llevada al cine y prohibida en la Argentina bajo la dictadura de Onganía. Otro título clave: Ada o el ardor. Truman Capote (4). Su obra capital es A sangre fría: la mayor novela del género Non Fiction (retrato novelado de hecho reales). Es la historia de la vida, crimen y muerte en la horca de dos asesinos marginales que masacraron a una familia en una granja de Kansas. Pero también son insoslayables sus relatos de Marilyn Monroe y Marlon Brando, y sus novelas Desayuno en Tiffany's y Otras voces, otros ámbitos (su primer libro).







Es imposible hablar de escritores malditos sin acudir a las figuras de Charles Bukowski (EE.UU), Henry Miller (EE.UU) y Jean Genet (Francia). El primero (1920-1994) es un referente fundamental de la rebelde e inconformista Beat Generation, antecedente del movimiento hippie. Exaltó al macho egocéntrico e ignorante que sólo busca placer en la violencia, el sexo y el alcohol. Títulos clave: Memorias de un viejo indecente y Erecciones, eyaculaciones, e exhibiciones y demás relatos de la locura cotidiana, autobiográficas. Miller (1891-1980) vivió diez años en París -una vida disoluta y escandalosa- y alborotó al mundo con la crudeza de sus novelas Trópico de Cáncer, Trópico de Capricornio, Sexus, Plexus y Nexus. Genet (1910-1986) pasó largos años en reformatorios y cárceles por robo y prostitución masculina. Sus novelas (Nuestra señora de las flores y El milagro de la rosa) y su autobiografía Diario de un ladrón son clave, lo mismo que su formidable pieza teatral Las criadas.